La víctima sufrió abuso por su padrastro desde los 12 años, situación que se prolongó por largo tiempo.

Fue recién en el año 2020 cuando la menor y su madre denunciaron los hechos ante la policía y en marzo de 2021 se lo imputó por “reiterados delitos de abuso sexual especialmente”. Se impusieron entonces medidas cautelares y luego prisión preventiva.

Ahora, el sujeto deberá cumplir una condena de diez años de presidio.